Fútbol y el 8M.

 ¡Buenas a todos y a todas!

En esta semana les vengo a comentar lo ocurrido este fin de semana en el derby madrileño, una gran cantidad de hinchas de Atlético de Madrid tomaron las calles de la capital para recibir a su equipo en los aledaños de su estadio ante el importante partido contra su máximo rival, el Real Madrid.

Esto se produjo en la tarde el 7 de marzo, justo el día antes del 8M, una manifestación ya tradicional en nuestro país y en muchas partes del mundo, tras esto saltó el debate. ¿Por qué estos aficionados estaban aglomerados recibiendo a su equipo y al día siguiente las mujeres de todas España no podían salir a la calle para luchar por sus derechos?

En otros momentos mi argumento hubiera ido más dirigido a la importancia que le damos al fútbol en este país y que prácticamente lo tiene todo permitido a cambio de la cantidad de dinero que mueve semana tras semana, pero en la actualidad no está siendo así, estadios de capacidad de hasta 96 mil personas llevan cerrados y sin permitir el acceso a sus aficionados desde que estalló la pandemia en España, ni si quiera han permitido aforos reducidos en ninguna de las ligas profesionales del país y tan solo pueden asistir a los partidos personas que forman parte del club y algunos periodistas. La imagen del fútbol estaba siendo idónea hasta el momento, ni si quiera se habían producido celebraciones cuando el Real Madrid, equipo probablemente con más aficionados en España, conquistó la liga la pasada semana. Mi pensamiento llega a que esta afición, una vez más, ha superado los límites de lo permitido en las aficiones. Desde el estado no se tomó ninguna medida para evitar este escandalo que está dando la vuelta al país y que nos deja en muy mal lugar, pensando en que podría pasar desapercibido y permitiendo este desastre. 

Rápidamente las redes estallaron, en especial porque días antes se había prohibido cualquier tipo de manifestación con motivo del 8 de marzo, día de la mujer, lo cuál hizo quedar aún en peor lugar tanto a los aficionados al fútbol como a las personas que habían prohibido una importante manifestación justo al día siguiente, pero creo que son problemas totalmente diferentes, el estado permitió esta aglomeración por no esperársela y cree que no iba a tener mucha importancia y pasaría desapercibida y prohibió las manifestaciones del 8M por miedo a sus opositores, para mí un grave error, ya que, desde que comenzó la pandemia el pasado año los partidos de ultra derecha han tratado de convencer a España, y a una parte de ella han conseguido convencerla de que el problema del la pandemia fue culpa de las mujeres y del feminismo, un discurso completamente disparatado que ha conseguido calar en la sociedad, en lugar de apoyar el feminismo, ellos siempre se han posicionado claramente en contra y el pasado año con el positivo de Irene Montero, poco después de esta manifestación, acusaron a esta manifestación de ser el foco de reproducción del virus, mientras ellos llenaban el palacio de Vistalegre de seguidores en esos mismo días, pero en momentos tan difíciles parece que la sociedad tira a agarrarse a cualquier motivo para culpar y con esto desde la derecha han conseguido que este año en España no hayan podido ser visibles millones de mujeres que sufren desigualdades a diario en nuestro país y sí en otros países de Europa. La sociedad en muchas ocasiones no consigue deshacerse de las opiniones que no son positivas para progresar y esto consigue que al final ni evitemos aglomeraciones ni luchemos por nuestros derechos.